Pardillos y sus excusas

Tweet

Tarde de ensayos la de ayer para Real Madrid y F.C. Barcelona, tarde previa a la semana grande de la temporada, al menos, en lo que a las competiciones domésticas se refiere, para ambos equipos. El Martes se disputan entre los dos una plaza para la final de la Copa del Rey y el Sábado el clásico liguero en el Bernabéu, dado que el duelo en liga carece de importancia merced a los 16 puntos de diferencia que existen en la clasificación entre los dos clubes, la de ayer fue una tarde dedicada a preparar el partido copero.

Al final, dos victorias por idéntico resultado, dos partidos complicados, dos remontadas y dos ruedas de prensa muy distintas.

Poca historia la del partido del Madrid en Riazor, una primera parte en la que el Madrid pudo salir goleado, al menos 4 ocasiones claras del Depor, pero que se saldó con un mínimo 1-0. En la segunda parte, la entrada de los buenos, Cristiano, Özil y Khedira, cambia el partido y el Madrid logra llevarse la victoria. Nada especial, nada raro, nada que, en realidad, destaque.

Rueda de prensa de Aitor Karanka, otra vez, Mourinho ha decidido salir solo en las derrotas y que sea el "mouñeco" vasco el que parlotee en las victorias, una vez más, el escaso discurso del segundo de Mou se centra en árbitros y la enésima resurrección de Kakà. El tema del delantero brasileño es casi lógico, tener a un jugador que costó una fortuna y que solo te sirva para jugar solteros contra casados como el de ayer, que nadie este dispuesto a librarte de el sin que pierdas muchísimo dinero, te lleva a, casi como obligación  intentar reivindicarlo, en realidad es ponerlo en el mercado, a la mínima actuación meritoria que protagonice.

El partido de Kaka`de ayer fue tan misero en calidad como la gran mayoría de los que lleva disputados desde que aterrizó en el Real Madrid, con la salvedad que, por fortuna y calidad, estuvo presente en las jugadas de los dos goles Madridistas, anotando el primero con un buen disparo y filtrando un buen pase para Cristiano en el segundo. El resto de los 90 minutos que ayer disputó fueron infames, como de costumbre.

Además del asunto Kakà y su vuelta, el otro dato que destacó el bueno de Aitor en su comparecencia ante la prensa fue la estúpida expulsión de Di María ya en tiempo añadido, dejando como titular la siguiente afirmación "Será noticia el día que acabemos con 11 jugadores".Vamos a ver la jugada en cuestión:

Tras ver la jugada resulta evidente que Di María actuó como un pardillo al interferir en el saque de una falta por parte del Deportivo hasta tal punto que al colegiado Álvarez Izquierdo no le quedó más remedio que expulsarlo, porque hay que ser muy pardillo para pensar que quedarse mirando al árbitro con una sonrisa en la cara, de manera un tanto desafiante, mientras te muestra una tarjeta amarilla es una buena idea, pero, es todavía de más pardillo pensar que, tras ese comportamiento, la mejor idea es permanecer durante unos cuantos segundos más en la posición por la cual te han amonestado volviendo, otra vez, a mostrar una actitud desafiante al árbitro. Expulsión estúpida, digan de un gran pardillo como Di Maria, pero expulsión totalmente justa.
Que, habiendo visto las imágenes, todas las palabras que Aitor dedique a la jugada sean de descargo, de queja, en definitiva, otro lloro más por parte del cuerpo técnico madridista, es una nueva demostración de la poca vergüenza que estos tipos se gastan en rueda de prensa y de la indulgencia con la que sus palmeros los suelen tratar. Hoy son titulares en toda la prensa filomadridista la resurrección de Kakà y la expulsión de Di María, pero apenas nadie habla del papelón que el Real Madrid hizo en la primera, en la que mereció salir goleado por el colista de la Liga, ni tampoco nadie reprende al pardillo Di María por su actitud, que no solo le costó la expulsión ayer, sino que, además, le obliga a perderse el clásico liguero del próximo Sábado.

En resumen, partido en el que algunos jugadores blancos debían descansar para ahorrar fuerzas para lo que llega, partido malo de solemnidad en su primera parte que obliga a estos jugadores a salir al terreno de juego para voltear el resultado, ensayo fallido. Excusas baratas en rueda de prensa.
Un clásico madridista.