Messi, Villa y el clavo ardiendo de la caverna

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Dado que entramos en semana de doble clásico, en la caverna saben que toca afilar lanzas y lanzar estocadas contra todo lo que huela a azulgrana, visto que, salvo el accidente en Milán, pocos argumentos deportivos les deja este Barça para que intenten hacer sangre, el argumento con el que deciden encarar esta semana, vuelve a ser, de nuevo, la supuesta mala relación entre Messi y Villa, lo sorprendente del reflote de este tema es el argumento bajo el que se amparan para hacerlo, ni más ni menos, la confirmación de la mala relación entre los dos futbolistas azulgranas se demuestra observando que Messi tan solo pasó la pelota en una ocasión a Villa en los 90 minutos frente al Sevilla. ¡CON DOS BEMOLES!

El argumento al que ahora se agarran desde AS.com, es tan sumamente estúpido que incluso se desmonta en el propio artículo en el que lo nombra, según ellos, Messi solo envío la pelota a Villa en una ocasión, mientras que Alexis y Tello lo recibieron en 4 y 3 ocasiones respectivamente, ya de por si estos números con constituyen una diferencia tan grande como para provocar que nadie se fije en ella, pero, si además de observar los datos, los contextualizamos, estos números se diluyen como un azucarillo en el agua.

De salida, Villa ocupó un lugar en la parte izquierda del ataque del F.C. Barcelona, mientras que Alexis y Messi se iban alternando su lugar entre el centro y la banda derecha, contando además con la tendencia de Messi de bajar hacia el centro del campo para combinar con los centrocampistas y, sobre todo, su buena sintonía con Dani Alves, la propia gente de AS certifica que fue con el compañero con el que más combino, 10 pases de Messi al brasileño Contando con esto, podemos concluir que, durante la primera parte, Villa y Messi estuvieron en dos zonas muy diferenciadas del ataque, así que, tampoco es tan raro pensar que, durante los primeros 45 minutos, simplemente no hubo pases porque no compartieron posiciones.

En la segunda mitad, tras la entrada de Tello en sustitución de Alexis, Villa pasó a jugar en el centro del ataque, como 9 puro, mientras que Messi se situó de media punta cayendo ocasionalmente, como es costumbre en el, a la banda derecha o al centro del campo, después de Alves, los jugadores con los que más combinó fueron Thiago e Iniesta. El trabajo de Villa durante la segunda mitad no fue otro que el de rematar, como hizo en el gol del empate, los centros que viniesen desde las bandas, y, sobre todo, limpiar el centro del ataque de defensas para la llegada de jugadores desde la segunda línea de ataque, como hace perfectamente en el segundo gol, fijando a los centrales del Sevilla para que Messi aparezca por detrás con menos vigilancia de la habitual. De nuevo, el trabajo de Messi y Villa tampoco les obligaba a combinar en exceso, de nuevo, nada fuera de lo normal en los datos que presentan en AS.

Para dejar aun más en el absurdo el argumento de AS, en realidad, no es necesario recurrir a las explicaciones anteriormente mencionadas, simplemente, nos basta con echar un vistazo a la entrevista que Messi concedió a TV3 nada más finalizar el encuentro:

En la entrevista Messi asegura que le conviene jugar con Villa de 9, que lo libera, que le facilita espacios, muy buenas palabras para el delantero asturiano, muy alejadas de la supuesta inquina hacia el.

Todavía resulta más sospechoso observar como, tras anotar Villa el gol del empate, es precisamente Messi, el primer compañero que lo felicita:

Pero, bajo mi punto de vista, lo que desmonta por completo el argumento de AS es, precisamente, el propio argumento, dicen que Messi solo le pasó un balón a Villa en los 76 minutos que jugaron juntos, presentan algunos datos de cuantos balones pasó Messi y de a que compañeros lo hizo, pero, sin ningún rubor, no ponen sobre la mesas ninguno de los número de Villa, ni con que jugadores combinó más, ni cuantos balones pasó el asturiano al argentino, es decir, presentan datos sesgados y sacan conclusiones interesadas. Argumento inválido de todas, todas.

El de la relación entre Villa y Messi es el clabo ardiendo al que se agarran durante lo que llevamos de temporada, para arremeter contra el Barça y contra Messi, ahora el delantero asturiano les preocupa mucho, les interesa su estado físico y anímico de cara a la selección, ya pasaron aquellos tiempos en los que,  tras fichar por el F.C. Barcelona después del Mundial de Sudáfrica, casi cualquiera podía hacer el papel de Villa en el combinado nacional, se dudaba de sus condiciones, se dudaba de su físico, se dudaba de cualquier cosa que hicise, en definitiva, Villa, por exceso o por defecto, siempre ha sido un argumento de la caverna para malmeter contra el Barça., su clavo ardiendo.
Van a tener muy mala suerte, ya que, como tanto han insistido en asegurar, es probable que el asturiano abandone el club al finalizar la temporada. ¿Que harán sin su clavo ardiendo? Sin duda, inventarán otro.